Botánicos de todo el mundo se han mostrado mayoritariamente a favor de modificar los nombres de ciertas plantas que en la actualidad podrían considerarse como ofensivos. La decisión fue tomada hace algunos días en el marco del Congreso Internacional de Botánica llevado a cabo en la ciudad de Madrid, en el cual se juntaron más de 100 investigadores para discutir este y otros asuntos.
Se aprobó que todos los nombres de plantas, hongos y algas que contengan la palabra caffra, utilizada como un insulto la población de piel oscura, sean reemplazados por la palabra affra, con el fin de resaltar su origen africano. Por ejemplo, la Erythrina caffra o árbol del coral, ahora pasará a llamarse Erythrina affra.
Asimismo, también se solicitó la creación de un comité especial que se encargará de otorgar nombres a las plantas, hongos y algas recién descubiertas. Tradicionalmente, las nuevas especies eran nombradas por quienes las describían por primera vez en la literatura científica. Sin embargo, este nuevo comité podría anular los nombres si se llega a la conclusión de que estos pueden resultar ofensivos o despectivos para con alguna raza o gentilicio.
No obstante, los expertos no llegaron a un acuerdo con respecto a los nombres que puedan contener etiquetas históricas controversiales, como el escarabajo marrón Anophthalmus hitleri, que hace referencia a Adolf Hitler, o la polilla Hypopta mussolinii, derivado del apellido del dictador fascista italiano Benito Mussolini.
De acuerdo con Sandy Knapp, botánico adscrito al Museo de Historia Natural de Londres y presidente de la sesión en la que se decidió el cambio de las nomenclaturas, “este es un primer paso monumental para abordar una situación que se ha convertido en un verdadero problema para la botánica y otras ciencias biológicas”.
“Hasta ahora solo hemos dado un pequeño paso, solamente eso. Sin embargo, esta decisión de los botánicos debería servir como ejemplo a la comunidad científica encargada de la denominación de organismos para que entiendan que es preciso debatir y tener más conciencia sobre los nombres que deberían permitirse”, aseguró.
Por su parte, el profesor Gideon Smith, de la Universidad Nelson Mandela de Sudáfrica y líder de la iniciativa para eliminar la palabra caffra de la taxonomía botánica junto con la profesora Estrela Figueiredo, mostró su satisfacción por “la erradicación retroactiva y permanente de un insulto racial de la nomenclatura botánica”.
“Es muy alentador saber que más del 60% de nuestros colegas apoyó nuestra propuesta”, aseveró Smith.
