El multimillonario estadounidense Elon Musk se vio envuelto el fin de semana en un pleito legal en Brasil luego de enfrentarse públicamente a un juez de la Corte Suprema debido a una orden judicial que, entre otras cosas, obliga a la red social X (antiguamente conocida como Twitter) a cerrar varias cuentas asociadas con contenidos ultraderechistas.
En este sentido, el juez Alexandre Moraes aprobó una ley que ordenaba a X la desactivación de varias cuentas en el marco de una investigación sobre los hechos violentos ocurridos a principios de 2023, cuando el expresidente brasileño Jair Bolsonaro realizó maniobras para mantenerse en el poder tras su derrota en los comicios de octubre de 2022.
Moraes también estipuló multas de alrededor de 20.000 dólares por cada día de incumplimiento, y prohibió la divulgación de los nombres de las cuentas desactivadas. No obstante, Musk se opuso a tal medida y pidió al juez su dimisión, calificando sus acciones de “censura agresiva” y manifestando su firme decisión de revertir la desactivación de las cuentas.
“Este juez impuso grandes multas, amenazó con arrestar a nuestros empleados y con suprimir el acceso a X en Brasil”, expresó el magnate.
Debido a estas declaraciones, Moraes reveló el domingo la apertura de una investigación contra Musk por presunta obstrucción a la justicia.
Como respuesta, el multimillonario aseguró que “este juez ha traicionado al pueblo de Brasil y ha violado la Constitución. Debería renunciar o ser enjuiciado”.
Cabe destacar que el procedimiento ordenado por Moraes contó con el apoyo de diversos funcionarios del estado brasileño, entre ellos el procurador general federal, Jorge Messias.
“No podemos vivir en un país y en una sociedad en la que multimillonarios residenciados en el extranjero controlen las redes sociales y violen el Estado de derecho, negándose a cumplir órdenes y amenazando a nuestras autoridades”, afirmó Messias.
Por su parte, el ministro de Comunicaciones, Paulo Pimenta, dijo: “no permitiremos que nadie, por mucho poder que tenga, afrente a nuestro país. […] Brasil nunca será el patio trasero de la ultraderecha”.
Aparte de esta investigación sobre lo que calificó como “milicias digitales” afines al expresidente Bolsonaro que participaron en un intento de golpe de Estado del 8 de enero de 2023, cuando cientos de personas violentaron varios edificios gubernamentales en Brasilia, Moraes también encabeza otra pesquisa contra ejecutivos de Telegram y Google por su presunto rol en una campaña mediática para desacreditar un proyecto de ley de regulación de Internet.
